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PERASHAT “NITZAVÍM – VAYELEJ” – פרשה נצבים וילך
- septiembre 7, 2023
- Publicado por: Admin
- Categoría: Sección Torah
¡¡Lejaím!! (Comentario sobre la Perashat Semanal)
Aromas de Rosh HaShaná. Las fiestas comienzan por ‘olerse’. El sentido del olfato identifica días y horas que se avecinan. Imágenes que retornan una tras otra, uniendo cuadros de años –décadas tal vez- en un único movimiento del abrir y cerrar de ojos. Aromas de familia, de presencias incondicionales y de ausencias que se sienten cada vez más y más. Toda la historia personal pasa a ser revistada en estos tiempos, tanto como la espiritualidad merece ser revisada. Porque los aromas traen consigo ingredientes. Casi los mismos que condimentan nuestra diario existir, nuestras búsquedas cotidianas, nuestros esfuerzos por querer transformar nuestros destinos, si lo logramos…
Este Shabat mira el nacimiento de un nuevo año. Todo es expectativa y todo es espera. Tal vez por ello la semana que comienza al finalizar el último Shabat del año, esté signada por un pedido íntimo, diría muy personal y hasta a veces no pronunciado: ¡Cómo quisiera el próximo año aprovechar verdaderamente mi tiempo! ¡Cuánto quisiera poder dedicarle más tiempo a mi esposa, a mis hijos, a mis nietos! ¡Cómo y cuánto debería preocuparme por preservar mi salud –física y espiritual-, un poco más, prestándome más atención!…
Y es lícito. Porque los cierres de ‘balances’ incluyen siempre los ‘debe’. Y con la esperanza de un nuevo ciclo, renuevo lo que otros años fueron sólo deseos, pero que en “éste, ya lo verán, lo habré de lograr”.
Es por ello que el tiempo previo está plasmado de “Selijot”…Es cierto. No me caben dudas de cómo Mi Buen Creador, debe perdonarme. Por mis faltas ante Él, por sobre todo. Por mis faltas ante Usted, en segundo término. Pero, allí, en esa lista, están las faltas ante mí mismo: todo lo que postergué, lo que dejé de lado, lo que pospuse hasta ese ‘mañana’ que jamás llega. Eso es lo que me hace humano. Falible. Y por sobre todo, poco creíble.
Hablábamos de ‘aromas’…Y por cierto, ellos provienen no sólo de comidas. Son olores comunes de generaciones que aspiraron el dulce encanto de saberse judías, comprometidamente judías, y buscaron ligarse y ligar a las vinientes a esa cadena armónica y eterna donde cada eslabón refulge con brillo propio y sostenido. Tiempo de Selijot. Plegarias que nos preparan desde el alma, para pedir por nuestras vidas. Para saber apreciar la vida. Para poder comprender el valor de cada día. De cada hora tal vez. Para rogar a cada ser, poder expresar, cada sentido, cada éxito y cada fracaso asumido; para enseñar que en todos los caminos hay montañas para escalar y hay precipicios llenos de vacíos; y que debemos andar. Haciendo esos caminos que se llaman vida diaria; que construyen ideales y edifican fantasías…Y que a veces, sobrevienen golpes. Pero siempre, alguien nos acerca una caricia…
Este Shabat, leemos coincidentemente en nuestra maravillosa Torá, “Atem Nitzavím haYom culejem…”. ‘Vosotros estáis hoy firmemente parados’. La seguridad de donde estamos, la tranquilidad de poder continuar nuestro camino. Nada más auspicioso. Nada más hermoso. Sabernos afirmados en nuestras decisiones; prestos para seguir, a paso firme, el camino. Llegamos munidos de esas súplicas tan significativas –más que nunca- porque me doy cuenta que han pedido por mí, por los que quiero, por los que abrazo…
Y eso me permite ‘estar de pie’. Afirmado una vez más en medio de un continente no siempre ‘continente’. Pero estoy de pie frente al Rey. Malkenu. Aunque también, estoy frente a Mi Padre: Abinu…
Aromas de Rosh HaShaná decíamos. Olores únicos que evocan historias. Relatos de amor y de esperanza. Encuentros de vida con los presentes. Memorias eternas, con aquellos que están siempre. Todos incluidos en la plegaria. La plegaria más simple y más hermosa que puede el hombre pronunciar con sus propia boca: ‘Selaj Ná…’: ¡Te ruego mis D’s! ¡Permíteme continuar mi camino sin obstáculo alguno!
Nuestro ruego singular al Creador, para que Quiera en los días por venir, hacer transitables nuestros caminos…Caminos con metas seguras. Caminos de elevación –aliá– en lo físico y en lo espiritual. Caminos agradables, caminos de vida, caminos debidos…
¡¡Shabat Shalom uMeboraj!! ¡Shaná Tová uMetuká!
Cómo hago para poder Yo atravez de la embajada hacer el registro de nacionalidad cómo ciudadano Israel ya que soy la cuarta generación de un desendiente mi abuela se llamaba Josefina bohormitad hija de un judío